¿Sabías que...?

¡Buenos días, amigos de los perros! En nuestra entrada de hoy, humanizaremos (aún más si cabe...) a nuestros amigos. Sí, habéis leído bien, "humanizar". 

¿Por qué? Por una sencilla razón: Si la envidia os parece un sentimiento muy "humano", tened cuidado. ¿Sabíais que vuestros perros pueden sentir envidia?

Lluna. Ella no siente envidia, es la mimada de casa. ¡Gracias, David!

Así es amigos. Aunque la envidia pueda parecer algo muy "miserable" cuando hablamos de animales tan nobles como los perros, lo cierto es que pueden sentirla, según un estudio de la prestigiosa revista Proceedings de la National Academy of Sciences.

El estudio mostraba una muestra de perros de diferentes razas y edades. A un grupo se le daba juguetes y galletas, mientras otro sólo se limitaba a observar su mala suerte.

El grupo que no recibía nada, se mostraba molesto y con una actividad cerebral similar a la del estrés. Además, parecía evitar intercambiar miradas posteriormente con los "afortunados".

Otro mito que rompió el estudio fue que los perros tampoco pueden sentir culpa. Así que ya sabéis, cuando os estén mirando con "esos ojitos" después de haber robado comida de la mesa, no están sintiéndose culpables, sino que responden al reproche de su dueño. 

Eso es todo por hoy, amigos. ¡Esperamos que paséis un buen fin de semana con vuestros amigos!